Calle Capitulares s/n
Córdoba
POR UNAS PENSIONES PÚBLICAS DIGNAS (8/1/24)
Debido a la lucha del movimiento de pensionistas, hemos conseguido que las pensiones públicas se revaloricen para 2.024 en un 3,8%, las mínimas y no contributivas en un 6,9%, y las de viudedad con cargas familiares un 14,1%, pero esas subidas son insuficientes.
La pensión mínima unipersonal de jubilación o viudedad, pasa a ser de 825,20 euros mensuales, y la pensión no contributiva de 517,9 euros mensuales, a los que habría que añadir el complemento anual de la Junta de Andalucía, que después de la subida del 10%, es decir 16,22 euros anuales, pasa de los 162,20 euros a 178,42 euros en este 2024 (en el País Vasco este complemento anual es de 4.811,40 euros), por lo que las personas que la perciben, la mayoría mujeres, se encuentran por debajo del umbral de la pobreza.
El 65.92% de los pensionistas en Córdoba no llegan a 1.080 euros al mes, la cantidad en la que el Estado fija el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), y por ello, exigimos que la pensión mínima se equipare al SMI, y este se sitúe en el 60% del salario medio, como recomienda la Carta Social Europea.
Tenemos que acabar con la brecha de género en salarios y pensiones, que se va a agravar con el aumento de los años para el cálculo de las futuras pensiones.
Exigimos que se realice la auditoría de la Seguridad Social, de inmediato y con garantías, tal como recoge la Ley 21/2021 de 28 de diciembre, Dicha AUDITORÍA TENDRÁ QUE ELABORARSE EN EL PLAZO DE 6 MESES, por lo que el plazo de ejecución se ha incumplido. Estamos convencidos de que la auditoría nos dará la razón y certificará que el sistema público de pensiones es sostenible, y que no se pueden justificar los recortes.
Tiene que derogarse o reformarse la Ley 12/2022 de 30 de junio, de regulación para el impulso de los planes de pensiones de empleo, para que no haya menos ingresos en las cotizaciones sociales, ni para que existan desgravaciones fiscales en el IRPF, ni en el Impuesto de Sociedades, ya que solo beneficia a las rentas altas, y a bancos y aseguradoras, y supone un debilitamiento del Sistema Público de Pensiones a corto y largo plazo, así como de la Hacienda Pública.
Somos un movimiento preocupado por los problemas globales de la gente, por la Sanidad, por la Educación de nuestros hijos y nietos, por quienes no pueden valerse por sí mismos y necesitan ayuda, en casa, o en centros debidamente dotados de medios y personal.
Nos preocupa la soledad no deseada de las personas mayores, la degradación del medio ambiente, y especialmente, la pobreza y la desigualdad social, que, crisis tras crisis, vienen aumentado de forma alarmante.
Nos preocupa el atentado que está sufriendo la verdad en nuestras relaciones, el cinismo en los medios de comunicación, de forma que la gran mayoría de ciudadanos y ciudadanas está confundida, y es capaz de apoyar políticas y partidos cuyos programas claramente perjudican sus intereses.
Trabajadoras y trabajadores en activo, personas pensionistas hombres y mujeres, jóvenes… tenemos las mismas reivindicaciones urgentes: Apostar por un modelo productivo hacia sectores más innovadores, hacia la agricultura y ganadería ecológicas, con empresas de transformación de los productos agropecuarios, que creen empleos de calidad, recuperar el poder adquisitivo de salarios y pensiones, acabando con la brecha de género en las mismas, e impulsar y desarrollar los servicios y las políticas públicas, que garanticen mediante un reparto equitativo de la riqueza, el acceso a una vida digna de ser vivida.
¡¡GOBIERNE QUIEN GOBIERNE, LAS PENSIONES Y LO PÚBLICO SE DEFIENDEN!!
