Arcángel Bedmar González
La Transición y la II República española presentan muchas similitudes históricas. Recordemos que tanto los cinco años de gobiernos republicanos hasta la guerra civil (1931-1936) como los cinco años del gobierno de Adolfo Suárez (1976-1981) fueron etapas de transición de la dictadura a la democracia –en un caso desde las dictaduras de Primo de Rivera, Bereguer y Aznar, y en el otro desde la del general Franco–, y durante estos periodos de cambio es muy frecuente que aparezcan tensiones e inestabilidad política y social. Por ejemplo, durante la Transición, que es considerada un modelo de convivencia entre españoles, entre finales de 1975 y finales de 1983 hubo más de 2.663 víctimas por violencia política entre muertos y heridos hospitalizados. De estas víctimas, 591 perdieron la vida, según el investigador Mariano Sánchez Soler. Por tanto, huelgas, manifestaciones, violencia política y social, atentados, contexto de crisis económica internacional (crack del 29 y crisis del petróleo de 1973), golpismo militar, extremismo político e involucionismo acompañaron a ambos periodos de nuestra historia reciente. La similitud histórica se aprecia también en la manera en que acabó la II República, con un golpe de Estado militar iniciado el 18 de julio de 1936, y en que la Transición posiblemente hubiera finalizado igual, con una etapa represiva y una dictadura, si hubiera triunfado el golpe de Estado del teniente coronel Antonio Tejero Molina el 23 de febrero de 1981.
Durante la Transición (al igual que en la II República Española) los grupos militares golpistas fueron una de las mayores amenazas para la incipiente democracia. Culpaban a la democracia, entre otros males, de la legalización del partido comunista en abril de 1977, de la puesta en marcha del proceso autonómico, del terrorismo (ETA, por ejemplo, causó 77 muertos en 1979 y 95 en 1980) y de la inestabilidad política y social. Estos sectores militares contaban con el apoyo de la prensa ultraderechista, como el diario El Alcázar; de pistoleros encuadrados en grupos terroristas como los Guerrilleros de Cristo Rey, la Triple A y el Batallón Vasco Español; y de agrupaciones políticas como Fuerza Nueva, liderada por el notario Blas Piñar.
Aun así, la fuerza electoral en aquel momento de la ultraderecha era ínfima y sus partidos políticos (incluida la Falange, que se presentó dividida) no llegaron a sumar el 1% de los votos en las primeras elecciones legislativas celebradas en democracia el 15 de junio de 1977. Es verdad que dentro de Alianza Popular, fundada por siete ministros exfranquistas, también encontramos a sectores nostálgicos de la dictadura, pero su respaldo electoral también resultaba escaso, pues en junio de 1977 este partido alcanzó el 8,21% de los votos en España y el 9,32% en Córdoba. La primera intentona golpista seria durante la Transición se materializó en la Operación Galaxia en noviembre de 1978, que acabó con la detención de sus ideólogos antes de que pudieran llevar a cabo su plan. En mayo de 1980, los dos principales conspiradores, el teniente coronel Tejero y el capitán de la Policía Armada Ricardo Saénz de Ynestrillas, serían condenados en consejo de guerra a siete meses y seis meses de cárcel respectivamente.
Tejero volvió a la carga al poco tiempo, el 23 de febrero de 1981. Cuando tras la dimisión de Adolfo Suárez se estaba votando la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo como presidente de Gobierno, irrumpió en el Congreso al mando de unos 200 guardias civiles armados y secuestró a los diputados. Paralelamente, el capitán general de la III Región Militar, Jaime Milans del Bosch, sacaba los tanques a la calle en Valencia y decretaba el estado de excepción. Esa misma noche, después de horas de tensa espera y con medio país pegado a los transistores, el rey apareció en televisión apoyando el régimen constitucional, por lo que muchos militares dubitativos permanecieron al lado de la legalidad, y la intentona fracasó. El 27 de febrero se organizaron multitudinarias manifestaciones en las ciudades españolas en defensa de la democracia.
En caso de que el golpe militar del 23 de febrero de 1981 hubiera triunfado, la ultraderecha había confeccionado unas listas negras, provincia a provincia, con la intención de asesinar de manera inmediata a unas 3.000 personas comprometidas con la democracia y con la izquierda, según la información que publicó el semanario Actual el 20 y el 27 de agosto de 1982 con el título en portada de “Los que iban a morir el 24-F”. La lista había sido elaborada en diciembre de 1980, dos meses antes del golpe de Tejero, por las Milicias Populares Patrióticas, constituidas por elementos violentos escindidos de grupúsculos ultras como Fuerza Joven, Fuerza Nueva, Falange Primera Línea y Juventudes Nacional Revolucionarias. La revista Actual no llegó a publicar las listas de todos los nombres relativos a las ciudades de Madrid y Barcelona debido a su elevado número, aunque sí las del resto de España, incluida Córdoba.
En este aspecto de la elaboración de un plan previo y programado de eliminación de opositores políticos, los golpistas del 23 de febrero de 1981 siguieron una estrategia similar a los del 18 de julio de 1936. Estos últimos también habían tenido muy claro que la violencia sería el arma principal para asegurarse el éxito. De hecho, el 25 de mayo de 1936, dos meses antes del golpe del 18 de julio, las instrucciones secretas del “director” de la conspiración, el general Emilio Mola Vidal, a los otros militares implicados eran muy claras y no dejaban lugar a dudas: la acción habría de ser en “extremo violenta” y tendrían que aplicar “castigos ejemplares”. En la misma línea, un par de semanas antes del golpe de Estado, el 30 de junio, aludía en sus documentos a “eliminar los elementos izquierdistas: comunistas, anarquistas, sindicalistas, masones, etc.”.
Las listas de los que iban a ser asesinados tras el 23 de febrero de 1981 incluían mayoritariamente a candidatos en las elecciones de 1977 y 1979, a miembros de las ejecutivas de los partidos izquierdistas y nacionalistas y a los dirigentes de los sindicatos CCOO, UGT, USO y el nacionalista vasco ELA-STV. Junto a ellos aparecían larguísimas listas de literatos e intelectuales (Francisco Ayala, Antonio Buero Vallejo, Miguel Delibes, Camilo José Cela, Amando de Miguel, Antonio Gala, Juan Marsé, etc.), músicos (Luis Eduardo Aute, Paco Ibáñez, Paco de Lucía, Raimon, Miguel Ríos, etc.), actores y directores de cine (Ana Belén, Aurora Bautista, Fernando Fernán Gómez, Juan Diego, Alberto Closas, Tony Leblanc, Juan Antonio Bardem, Pilar Miró, Antonio Mercero, Concha Velasco, Paco Rabal, José Sacristán, etc.), periodistas (Consuelo Álvarez de Toledo, Forges, Antonio Álvarez Solís, José Luis Balbín, Juan Luis Cebrián, Mercedes Milá, Raúl del Pozo, Fermín Bocos, Eduardo Sotillos, etc), músicos, escultores, humoristas y otros muchos. Bastantes de estos nombres es posible que se tomaran de los archivos de la antigua Brigada Político Social (la policía secreta encargada de perseguir a los opositores en el franquismo), pues existían estrechos contactos en aquel momento entre la extrema derecha y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. En cuanto a políticos no izquierdistas, solo se incluía en la lista a Adolfo Suárez y al ministro de Interior Juan José Rosón (ambos de la UCD), y había también altos mandos militares comprometidos con el proceso democrático como los tenientes generales Gutiérrez Mellado y Quintana Lacacci, y el general Gabeiras Montero (estos dos últimos colaboraron en el fracaso de la intentona golpista del 23 de febrero).
La lista negra de los que iban a morir de manera inmediata en España, como ya hemos señalado, rondaba las 3.000 personas según la revista Actual. En Córdoba, incluía a 49. De ellas, 44 tenían relación con la provincia porque aparecían como candidatos por la circunscripción provincial en las listas al Congreso de los Diputados y para el Senado en las elecciones legislativas del 15 de junio de 1977. De otras cuatro desconocemos su vinculación con Córdoba y creemos que su actividad política se desarrolló en Sevilla, ya que fueron candidatos en las elecciones legislativas o municipales de esa ciudad o provincia en 1979. Por último, hay una persona de las que aparece en la lista, Sara Romero, de la que no hemos podido localizar ni su segundo apellido ni ningún dato de su actividad política o sindical.
Entre la relación de los cordobeses a eliminar, todos miembros de las listas al Congreso y al Senado que se presentaron a las elecciones legislativas del 15 de junio de 1977, se incluían a cinco de los siete candidatos del PSOE (todos menos el número uno al Congreso, Guillermo Galeote, que era de fuera, y Manuel Gracia) y a dos de sus tres senadores; toda la candidatura del PCE al Congreso y al Senado (salvo el número uno, Ignacio Gallego que era de fuera, y Julio Anguita, alcalde de Córdoba); toda la candidatura de Unidad Socialista (la alianza del Partido Socialista Popular de Enrique Tierno Galván y el Partido Socialista Andaluz), encabezada por el periodista Pablo Sebastián para el Congreso; toda la candidatura del Frente por la Unidad de los Trabajadores (conformada por partidos ilegales en aquel momento como la Organización de Izquierda Comunista, de la que procedían los candidatos cordobeses); toda la candidatura del Frente Democrático de Izquierdas (en el que se integraba el aún ilegal Partido del Trabajo de España, de tendencia maoísta) y cuatro de los candidatos de la Alianza Socialista Democrática, una lista en la que aparecían miembros del PSOE (Histórico) que no reconocían la autoridad de Felipe González.
De las coaliciones y partidos señalados, varios tuvieron una especial relevancia electoral en Córdoba durante la Transición. El PSOE, que siempre venció en las elecciones legislativas en la provincia, obtuvo el 33,82% de los votos en 1977, 30,12% en 1979 y 57,94% en 1982; el PCE, 16,49 en 1977, 19,11% en 1979 y 8,94% en 1982; Unidad Socialista (PSP y PSA), 3,66% en 1977, 9,97% en 1979 y 2,21% en 1982. Lo otros partidos de izquierda que aparecen en la lista negra constituían opciones minoritarias. Por ejemplo, el Frente Democrático de Izquierdas obtuvo solo el 1,15% de los votos en 1977.
La lista que publicamos a continuación incluye los 49 nombres relativos a la provincia de Córdoba que difundió la revista Actual el 20 de agosto de 1982, pero con algunas variaciones, ya que se han corregido errores en nombres y apellidos y se han añadido segundos apellidos o segundos nombres en bastantes casos. Los datos relativos a la actividad y militancia política y sindical son de elaboración propia, ya que la revista no incluyó esa información. Esta es la relación completa de los anotados por orden alfabético:
- Amaro Granados, Antonio, obrero de la construcción, miembro de CCOO, candidato nº 1 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977 y nº 1 por el MCA-OICE en 1979.
- Aparicio Lobo, Filomeno, abogado laboralista, miembro del Comité Central del PCE en 1976, candidato nº 4 al Congreso por el PCE en 1977 y al senado en 1979.
- Aumente Baena, José, médico siquiatra y escritor, uno de los fundadores del Circulo Cultural Juan XXIII, PSA, candidato por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Senado en 1977 y nº 1 al Congreso por el PSA en 1979.
- Blanco Villarreal, Vicente, candidato nº 1 al Congreso por la Alianza Socialista Democrática en 1977.
- Caballero Castillo, Ernesto, obrero de la construcción, secretario provincial del PCE, candidato nº 2 al Congreso en 1977 y nº 3 en 1979.
- Cabanillas Delgado, Manuel, candidato nº 9 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Camacho Lloriz, Matías, vendedor de prensa, senador por el PSOE en 1977.
- Campo Casasús, Carmen del, catedrática de enseñanza media, dirigente de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de la UGT, candidata nº 4 al Congreso por el PSOE en 1977.
- Castrillo Castrillo, Elena, profesora de EGB, candidata nº 6 al Congreso por el PCE en 1977.
- Castro Sánchez, Pedro, empleado de banca, miembro de CCOO, PSA, candidato nº 6 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Colmenar Rivero, Antolín, candidato nº 5 al Congreso por Sevilla por el PSOE (Sector Histórico) en 1979.
- Delgado García, Antonio, funcionario municipal, miembro de la dirección provincial de CCOO en 1977, PSA, candidato nº 4 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977 y nº 2 por el PSA en 1979.
- Díaz Tirado, Isidoro, maestro, candidato nº 5 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977 y nº 5 por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Díaz Jaro Romero, Luis, candidato nº 4 al Congreso por Alianza Socialista Democrática en 1977.
- Fernández Cruz, Emilio, obrero del metal, secretario provincial de la UGT en 1977, diputado por el PSOE en 1977, senador en 1979.
- Jiménez Delgado, Ildefonso, obrero de la construcción, miembro del Comité Central del PCE en 1976, dirigente de la federación de la construcción de CCOO en 1977, candidato nº 3 al Congreso por el PCE en 1977, candidato al Senado en 1979.
- López Gavilán, José, guía turístico, miembro del Comité Central del PCE en 1976, candidato al Senado por el PCE en 1977.
- López Rueda, Francisco, candidato nº 3 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Luna Toledano, Antonio, obrero del campo, miembro del Comité Central del PCE en 1976, dirigente de la federación agraria de CCOO en 1977, candidato nº 7 al Congreso por el PCE en 1977.
- Márquez Moreno, Antonio, dirigente de la UGT provincial en 1977, miembro del Comité provincial del PSP en 1977, candidato nº 3 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Martínez Bjorkman, Joaquín, abogado laboralista, senador por el PSOE en 1977 y 1979.
- Mesa Rodríguez, Cristóbal, trabajador del campo, dirigente de la Federación de Trabajadores de la Tierra de la UGT en 1977, candidato nº 6 al Congreso por el PSOE en 1977 y nº 5 en 1979.
- Morilla Gil de los Ríos, Enrique, candidato nº 6 al Congreso por el PSOE (Sector Histórico) de Sevilla en 1979 y candidato a concejal en el mismo año.
- Muñoz Fernández, Guzmán Antonio, perito industrial, miembro del Comité provincial del PSP en 1977, candidato nº 5 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Nieto Alcántara, Alfonso, obrero de la construcción, miembro de CCOO, candidato nº 4 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977 y nº 3 por el MCA-OICE en 1979.
- Nieto Molina, Francisco, administrativo, candidato nº 2 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Ojeda Moreno, José, candidato nº 8 al Congreso por el PSOE (Sector Histórico) de Sevilla en 1979 y candidato a concejal en el mismo año.
- Ortiz Atenciano, Francisco Alfredo, obrero del campo, miembro del sindicato CSUT (vinculado al PTE) en 1977, candidato nº 2 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977, miembro del SOC, candidato nº 2 al Congreso por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Palomo Gil, José Luis, técnico de Correos, secretario de organización del PSP en 1977, candidato nº 7 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Pérez Fernández, Felipe, empleado de Correos, candidato nº 4 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977 y nº 4 por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Pérez Ferrando, María Vicenta, profesora de EGB, candidata nº 3 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Pérez Pérez, Manuel, profesor de instituto, candidato al Senado por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977 y nº 1 al Congreso por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Pérez Torres, Francisco Antonio, candidato nº 8 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Prats Balaguer, Rosa María, trabajadora sanitaria, candidata nº 5 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Pujol de la Llave, Emilio, médico, candidato nº 1 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977 y candidato a concejal del Ayuntamiento de Sevilla por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Redondo Furriel, Mª Dolores, secretaria de información del PSP en 1977, candidata nº 8 al Congreso por Unidad Socialista (PSP y PSA) en 1977.
- Roldán Murillo, José Luis, abogado, candidato nº 7 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977.
- Romero, Sara.
- Salinas Moya, José Miguel, abogado, candidato nº 5 al Congreso por el PSOE en 1977, diputado en 1979.
- Sánchez Mármol, Fernando, candidato a concejal del Ayuntamiento de Sevilla por el Partido del Trabajo de Andalucía en 1979.
- Sebastián Bueno, Pablo César, periodista, PSA, candidato nº 1 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Suárez García, Francisco, candidato nº 6 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Torres García, Antonio, trabajador social, candidato nº 7 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
- Ubera Jiménez, Dolores, profesora, candidata nº 3 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977.
- Vallejo Rodríguez, Rafael, médico, secretario provincial del PSOE en 1976, diputado en 1977, senador en 1979.
- Ventura Limosner, Manuel, inspector de enseñanza, PSA, candidato nº 2 por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Congreso en 1977.
- Vera Peláez, Paz, auxiliar administrativo, candidata nº 6 al Congreso por el Frente Democrático de Izquierdas en 1977.
- Zurita de Julián, Antonio, secretario provincial del PSP en 1977, candidato por Unidad Socialista (PSP y PSA) al Senado en 1977.
- Zurita Morales, José, obrero, candidato nº 6 al Congreso por el Frente por la Unidad de los Trabajadores en 1977.
Fuente: https://arcangelbedmar.com/2018/05/09/la-lista-negra-del-23-f-en-cordoba/
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