El Defensor del Pueblo Andaluz ha emitido una resolución contundente en la que critica la imposición de un sistema de acreditación adicional para ejercer como guía turístico en el interior de la Mezquita-Catedral de Córdoba, una práctica impuesta por el Cabildo que restringe el acceso a guías debidamente habilitados por la Junta de Andalucía y del resto de Comunidad Autónomas.
En el documento, el Defensor reconoce que estas “pruebas de acreditación” suponen una limitación ilegal al ejercicio profesional y que no están amparadas por la legislación andaluza, que permite a los guías habilitados desarrollar su actividad en todo el territorio sin requisitos añadidos.
El Defensor destaca que la notoriedad del caso exige una especial atención hacia la actuación de la administración competente, pero tras la tramitación de la presente queja no hemos podido acreditar significativas reacciones.
Aunque la Inspección de Turismo no ha encontrado base para sancionar al Cabildo bajo el régimen actual, el Defensor considera que la falta de respuesta de las autoridades constituye una dejación de funciones y recomienda expresamente a la Delegación Territorial de Turismo que adopte medidas para garantizar el libre ejercicio profesional de los guías habilitados en este enclave patrimonial.
La resolución supone un respaldo significativo para la inmensa mayoría de profesionales del sector, quienes desde hace años ven limitada su actividad por un sistema arbitrario de exámenes convocados de manera discrecional por el Cabildo, que se traduce en un agravio profesional y económico que no tiene ninguna base jurídica y que afecta tanto a guías oficiales acreditados de Córdoba como del resto de Andalucía y de España.
Como guía turístico habilitado por la Junta de Andalucía trabajando en Córdoba solo puedo confirmar el desprecio y maltrato al que somos sometidos por parte del personal de seguridad del monumento, no ya dentro del templo sino que también en el patio de los Naranjos, donde somos increpados como si fuéramos delincuentes. Yo me preguntó si ellos son conscientes de que nuestra habilitación vale más que cualquier otro carnet y que al expulsarnos de «su monumento» por no portar un carnet complementario no tiene base jurídica alguna, lo cual convierte sus acciones en un delito. La Junta de Andalucía debería de una vez por todas hacer valer la habilitación de guía que expiden, porque en Córdoba no vale para nada si no nos sirve para poder ejercer en el monumento principal de la.ciudad y que todo turista viene a visitar.