Más de un 50 por ciento el profesorado interino secunda la primera jornada de huelga indefinida convocada desde hoy hasta el próximo 23 de marzo.
“Quienes están se quedan” y “la experiencia no se deprecia”. Han sido los eslóganes más coreados por los más de diez mil de docentes interinos que este mediodía se han manifestado en la capital andaluza para reivindicar su derecho a conservar sus puestos de trabajo. Una protesta multitudinaria que ha demostrado la unidad del colectivo interino que demanda a la Junta de Andalucía la negociación de un plan de estabilidad que garantice su hasta ahora más que incierto futuro laboral.
La manifestación, organizada por la Asamblea Andaluza de Profesorado Interino y los sindicatos CGT y USTEA ha inaugurado las dos semanas de huelga indefinida, desde hoy hasta el próximo 23 de marzo, en todos los colegios e institutos andaluces. Según los datos facilitados por los convocantes, en esta primera jornada más de un 50% del profesorado interino ha seguido la huelga que ha afectado a más de 500 centros educativos.
La marcha ha partido a las 12.00 del mediodía desde el Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta de Andalucía. Hasta allí han llegado más de 30 autobuses procedentes de las ocho provincias, pero el número total de manifestantes ha desbordado las previsiones de la propia organización ya que muchos profesores y profesoras se han desplazado hasta Sevilla en coches particulares. Tras dos horas de recorrido, la protesta ha culminado a las puertas del edificio Torretriana, sede de la Consejería de Educación, donde se ha leído un manifiesto con las principales reivindicaciones y una delegación del profesorado ha intentado sin éxito entrevistarse con la consejera Sonia Gaya.
“En Andalucía somos 20.000 profesoras y profesores interinos y lo más urgente es arrancar a la Junta de Andalucía el compromiso de que ninguno de nosotros se va a quedar sin trabajo de la noche a la mañana después de años de dedicación a nuestro alumnado y servicio a la Administración” ha explicado Carmen del Mar Úbeda Vargas, profesora de matemáticas y miembro de la Asamblea Andaluza de Docentes Interinos. Y es que ése es el temor que cada día cunde y se afianza más entre el colectivo ante la masiva oferta de empleo público lanzada por el gobierno central para reducir, a instancias de la justicia europea, la tasa de interinidad en el sector público: del 25% actual a un 8% en los próximos cuatro años.
“Estamos ante el mayor ERE encubierto de la historia de la democracia española” asegura Jara Huisa, maestra de primaria. “Esto es una operación para sustituir a unos trabajadores por otros porque saldrán a oposición las plazas que durante años venimos ocupando como interinos porque la administración, debido a los recortes en educación, ha ofertado un número irrisorio de plazas y ha usado a los interinos no para cubrir bajas o imprevistos, como marca la ley, sino para puestos estructurales. Y ahora sentimos que nos dejan tirados en la cuneta a sin que se valore nuestra experiencia”.
Por eso el principal requerimiento al Gobierno central por parte de los docentes interinos es la consolidación de plaza mediante concurso de méritos. Desde el colectivo se rechaza de forma unánime el Real Decreto aprobado el pasado 23 de febrero de 2018 que establece el acceso a los cuerpos docentes mediante una serie de pruebas eliminatorias en las que la experiencia sólo cuenta al final del proceso.
Un panorama de inseguridad laboral ante el que los interinos han decidido rebelarse: organizados en asambleas y con el apoyo de Docentes por la Pública, La Unión Sindical Estudiantil, Docentes en Acción, PADEI, SADI y PAEP. El seguimiento de la huelga podría afectar al calendario de evaluaciones del segundo trimestre, e incluso prolongarse si no encuentran respuesta a sus reivindicaciones. De momento, lo que sí está confirmado para el próximo viernes 16 de marzo, son concentraciones de protesta coordinadas en todas las provincias andaluzas.
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