En este nuevo episodio de SEMBLANZAS CORDOBESTIAS nos empleamos en la deconstrucción de dos mitos del más acendrado cordobesismo: Manolete y Julio Romero de Torres. El reto era humanizarlos, convertirlos en materia humana con sus virtudes y sus defectos y sobre todo con sus vicios, que en definitiva son los que más humanizan.
De nuevo, Manuel Harazem y el Sr. Gachasfrías, nos traen una divertida pero, a la vez, rigurosa, incursión en la historia de esta Córdoba tan nuestra como especial. ¡No os lo perdáis!
Como siempre genial. Mi amistad con Manolo me permitió conocer hace años la anécdota, pero escucharla novelada le da más empaque. A mi abuela si la pintó Julio Romero en el cuadro «Las aceituneras» en Cabriñana, Mi abuelo también cantaba como escribía Eugenio Noel el cante antiguo y tocaba la guitarra. Su amistad con Julio Romero fue quizás lo que le hizo asistir a los peroles en Cabriñana, y conocer allí a Antonia mi abuela, para fundar la dinastía. Ahora que fumara porros no lo sé, porque creo que no fumaba de nada.