El pasado viernes 26 de marzo tuvo lugar el debate sobre la Renta Básica Universal, organizado por Paradigma Media Andalucía con la colaboración de la Delegación de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Córdoba. El debate contó con una mesa de activistas de renombre: Rosa Blanco, de la Asamblea de Mujeres de Córdoba “Yerbabuena”, incorporada a la Plataforma por la Renta Básica Universal Córdoba; Cristina Pérez, de dicha Plataforma, y Rafael Del Castillo, exconcejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba. El acto estuvo presentado y moderado por Inés Fontiveros.
El propósito de la mesa de debate giró en torno a definir las razones para implantar una Renta Básica Universal, así como analizar las diferencias con el Ingreso Mínimo Vital y otras rentas condicionadas.
Partieron de qué se entiende por Renta Básica Universal, de la que resaltaron no hay gran conocimiento y sí, grandes prejuicios. Cristina Pérez recogió la definición de Ramiro Pinto, activista por la Renta Básica: “consiste en adaptar la economía del mundo actual, basada en un desarrollo tecnológico sin precedentes y en la globalización y así suplir los cambios en el mercado de trabajo por una cantidad mensual que se concibe por el derecho de ciudadanía. En definitiva, es democratizar la economía y alejar de la política el modelo totalitario de los grandes capitales que tiene secuestrado y supeditada a sus intereses a la democracia”
Pérez expuso los pilares básicos que definen a la Renta Básica: Universal, beneficiándose todas las personas por el simple hecho de serlo; Incondicional, pues no habría que demostrar ningún requisito para cobrarla; e Individual, pues se daría a la persona, no a la unidad familiar. Y debe ser suficiente para acceder a una vida digna. La cuota mensual debe situarse por encima del umbral de la pobreza, es decir, 9.009 euros al año por persona.
Todas las intervenciones recalcaron la importancia de su incondicionalidad para acabar con el estigma de la pobreza, pues pondría fin a los laberintos burocráticos y a la necesidad de demostrar la condición de pobreza para recibir cualquier subsidio. Por otro lado, su condición de individual supondría una herramienta de emancipación para las mujeres, para una mayor libertad y autonomía en sus vidas, como han defendido desde la Asamblea de Mujeres de Córdoba Yerbabuena.
Si todas las mujeres contaran con una Renta Básica Incondicional que las liberara de la preocupación por el futuro y por cubrir las necesidades familiares, tendrían una independencia que las ayudaría a vivir “una vida más rica” Rosa Blanco.
Este colectivo comenzó hace dos años la investigación sobre la Renta Básica, con el objetivo de comprender si podría ayudar a la vida de las mujeres. Rosa Blanco señaló la gran dificultad que supuso al principio romper con lo prefijado en el imaginario, los prejuicios sobre la pobreza y la vagancia, el mito de que el trabajo dignifica y del merecimiento a través del esfuerzo. Es decir, el típico “la vida hay que ganársela con el sudor de nuestra frente”, comentó Blanco. Pese al esfuerzo y el cuestionamiento necesario, en Yerbabuena asumieron el avance que supondría para las mujeres, las mayores perjudicadas en esta crisis, quienes ocupan los empleos más expuestos, con los trabajos más precarios y temporales. En demasiadas ocasiones sin contratos ni derechos laborales como en el servicio doméstico o en las condiciones de semiesclavitud de las mujeres en la fresa, como apuntó Blanco. La Asamblea de Mujeres Yerbabuena era consciente de la desprotección real que viven y concluyó que, si todas las mujeres contaran con una Renta Básica Incondicional que las liberara de la preocupación por el futuro y por cubrir las necesidades familiares, tendrían una independencia que las ayudaría a vivir “una vida más rica.”
Del mismo modo, Blanco resaltó la importancia para revertir la concepción del trabajo. Las mujeres podrían exigir mejores condiciones para ejercerlo, unido a lo que supondría de tiempo libre para expresar su creatividad, emplear el tiempo en lo que realmente preocupa, como contar con tiempo suficiente, así como las necesidades cubiertas para volcarse en el activismo y participar a nivel político con mayor agencia. Favorecería la intervención de las mujeres en el mundo y de las personas que hoy se encuentran en situación de exclusión.
Cristina Pérez comenzó su intervención con una sucesión de datos demoledores con el objetivo de aterrizar en la necesidad de una Renta Básica. En nuestra provincia, el 21% de los hombres en paro no cobran prestación alguna, en el caso de las mujeres la cifra se eleva al 66,5%. Córdoba se sitúa como la tercera ciudad de España con la tasa de desempleo más alta. Actualmente, el 43,1% de la población menor está en riesgo de pobreza en nuestra ciudad, la primera a nivel andaluz. Datos alarmantes que confirman la situación de extrema vulnerabilidad que vive un porcentaje amplio de la población, especialmente mujeres, migrantes y menores. Estos datos ponen de relieve la urgencia de una acción efectiva que confronta con la ineficacia de las medidas aplicadas hasta ahora, como el Ingreso Mínimo Vital.
Pone fin a los laberintos burocráticos y a la necesidad de demostrar la condición de pobreza para recibir cualquier subsidio. Cristina Pérez.
La Renta Básica no es una propuesta novedosa. Han trascurrido casi diez años desde que se debate en el seno europeo, si bien hoy parece más necesaria que nunca. Desde la Plataforma Córdoba por la Renta Básica demandan que se cumpla la Carta Social Europea, firmada por España en 1980, “un documento no vinculante como todo lo importante” declaró Pérez. Una de las campañas en activo se encamina al cumplimiento de la Renta Básica, ya que el Comité Europeo de Derechos Sociales ha informado desfavorablemente sobre las prestaciones sociales que se reciben en nuestro país que no alcanzan el mínimo marcado por el umbral de la pobreza. “Ninguna prestación social en España permite salir de la pobreza”, aseguró Del Castillo.
En la mesa la opinión era unánime, el Ingreso Mínimo Vital ha sido deficiente y no ha solucionado la situación que pretendía subsanar. Pérez indicó que solo el 6% de familias que lo necesitan se han beneficiado de él. “Mejor que nada, pero esperábamos más” concluyó Del Castillo.
El exconcejal de Servicios Sociales recalcó que las rentas condicionadas son una trampa para la ciudadanía. Estigmatizan a las personas y familias que las solicitan, que se ven forzadas a demostrar su condición de pobreza, con gestiones burocráticas muchas veces inasumibles y convierten en una odisea conseguir una renta de 300 euros. Del Castillo expuso como ejemplo las ayudas Covid del Ayuntamiento de Córdoba, que impusieron a las familias trámites electrónicos desmesurados para cobrar 150 euros. En la mesa se trató el coste de gestión de todas estas prestaciones que en ocasiones supera por ocho el importe de las ayudas, por lo que cambiarlas por una Renta Incondicional, que no requiriese de personal dedicado exclusivamente a valorar los casos ni a tramitarlos supondría un ahorro al liberase de la carga burocrática.
“Ninguna prestación social en España permite salir de la pobreza” Rafael Del Castillo.
Del Castillo subrayó que el miedo paraliza la adopción de medidas novedosas y que si respondemos afirmativamente a la pregunta de “si las personas tienen derecho a existir, a tener una vida con unos mínimos de dignidad y si estamos de acuerdo en que deben ser garantizados por el hecho de ser personas, debemos exigirles a nuestros gobiernos su cumplimiento.” No obstante, apuntó Del Castillo, hasta la actualidad no se ha conseguido y la Renta Básica parece la forma de asegurar ese mínimo de dignidad. “No se trata de dar un chalet en la playa” como señalan muchas personas detractoras, mantuvo el exconcejal, sino de poder llevar una vida normal. Atajó otro dilema de los que cuestionan la Renta Básica: la financiación. Del Castillo recurrió a los estudios del economista español Daniel Raventós que avalan que una simple redistribución fiscal posibilitaría financiarla. Hace dos años, Paradigma Media publicó un estudio de la Universidad de Málaga que concluía que en Andalucía se puede financiar sin que implique ninguna subida de impuestos. Desde la mesa se especificó que no supondría el desmantelamiento de los servicios públicos, sino la eliminación de las partidas que ya no resultaran necesarias.
A pesar de las investigaciones a favor, los detractores son numerosos. El propio exconcejal admitió haber creído años atrás que no era la solución y que la desigualdad social se resolvería garantizando el acceso al trabajo. Sin embargo, en España un puesto de trabajo no garantiza llegar a fin de mes, somos el tercer país de la Unión Europea con más trabajadores y trabajadoras en riesgo de pobreza. Asimismo, la Renta Básica no acabaría con el empleo, sería compatible, aunque forzaría a dignificar los puestos de trabajo. Lo que sí garantizaría es la equidad social, aseveró Pérez. “Tenemos derecho al ocio, al activismo, a ayudar a las vecinas, a tener ganas de hacer cosas por los demás”, continuó, “los experimentos han demostrado que cambia la autopercepción de las personas que la cobraban y la sensación de seguridad”.
“Algo se está moviendo. La Renta Básica ya está en marcha” Rosa Blanco.
Su materialización parece cada día más tangible. Tras las experiencias puestas en marcha en Finlandia, Barcelona o Kenia, sumado al trabajo de las plataformas y mareas por la Renta Básica Universal, su difusión ha crecido por todo el mundo. Ese trabajo se ha concretado en proyectos como la Iniciativa Ciudadana Europea o la Iniciativa Legislativa Popular para su aprobación presentada en el Parlamento Vasco. “Algo se está moviendo. La Renta Básica ya está en marcha”, sentenció Blanco.
Soy parada de larga duración,no cobro ninguna prestación y llevo más de un año sin trabajar,en la unidad familiar somos 3 adultos(4 con mi madre) y ninguno tenemos ingresos,estamos sobreviviendo de la pensión no contributiva de mi madre
Me podrían decir dónde tengo que ir para informarme sobre la Renta Básica Universal en Málaga?