Conscientes de que el calentamiento global del planeta ha pasado de ser una advertencia o una preocupación restringida a la comunidad científica y al movimiento ecologista, a ser una preocupación fuertemente instalada en la conciencia ciudadana, nace en Córdoba la iniciativa Cristianos y Cristianas por el Clima Córdoba (CxCC).
El proceso de toma de conciencia climática que ha impulsado esta iniciativa ha sido posible gracias a la insistencia y rigor con que la comunidad científica está presentando sus evaluaciones y ha sido especialmente estimulado por la publicación en el mes de mayo de 2015 de la En cíclica del Papa Francisco “Laudato Si. Sobre el cuidado de la Casa Común”, un documento extremadamente valioso que describe “Lo que le está pasando a nuestra casa”, detalla “La raíz humana de la crisis ecológica”, desarrolla en un capítulo la visión del Santo Padre sobre “Una ecología integral” y profundiza en el “Evangelio de la creación” explicando cómo está presente el respeto a la Naturaleza y a la vida en todas sus expresiones en los relatos bíblicos y cómo en cada criatura está presente el mensaje de la armonía de todo lo creado.
CxCC declara no ser una organización, plataforma o coordinadora, sino un punto de encuentro en el que poder reunir a toda la comunidad cristiana para, desde la comunión y la fraternidad, reconocer que «el cambio climático es un problema global con graves dimensiones ambientales, sociales, económicas, distributivas y políticas, y plantea uno de los principales desafíos actuales para la humanidad» (Laudato Si’ §25), de manera particular para los países empobrecidos, «particularmente afectados por fenómenos relacionados con el calentamiento, y sus medios de subsistencia dependen fuertemente de las reservas naturales y de los servicios ecosistémicos, como la agricultura, la pesca y los recursos forestales» (Laudato Si’ §25).
Las personas que participan en esta iniciativa son conscientes de que el camino no va a ser fácil debido a la magnitud del esfuerzo que hay que realizar, pues supone un cambio del modelo energético actual, basado en los combustibles fósiles, a un modelo energético basado en energías renovables. Esto supondrá necesariamente una reducción de la cantidad de energía disponible y obligará a revisar el modelo de consumo dominante: «comprar es siempre un acto moral, y no sólo económico» (Caritas in veritate §66). Pero «no hay que pensar que esos esfuerzos no van a cambiar el mundo. Esas acciones derraman un bien en la sociedad que siempre produce frutos más allá de lo que se pueda constatar, porque provocan en el seno de esta tierra un bien que siempre tiende a difundirse, a veces invisiblemente» (Laudato Si’ §212).
Cristianos y Cristianas por el Clima entienden que ha llegado la hora de que todas las personas y todos los colectivos y agentes sociales, económicos, políticos, sindicales, culturales e instituciones públicas presentes en la ciudad demos un paso adelante y adquiramos un compromiso firme en preservar una vida que merezca ser vivida reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. En este sentido, aplauden el compromiso institucional adquirido por todos los grupos municipales presentes en el Pleno del Ayuntamiento de Córdoba al aprobar el pasado día 14 de noviembre de 2019 la Declaración de Emergencia climática en la ciudad de forma unánime.
La presentación ante la opinión pública, bajo el paraguas de Cristianos y Cristianas por el Clima, es con el fin de contribuir a este proceso de toma de conciencia y de apuesta por la adopción de medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y proclamar que la hermana tierra «clama por el daño que le provocamos a causa del uso irresponsable y del abuso de los bienes que Dios ha puesto en ella» (Laudato Si’ §2). Por ello, se suman así a un movimiento que va abriéndose un hueco entre diferentes colectivos de la ciudad que han manifestado su compromiso climático con la humanidad y sus criaturas. Además de suscitar en otros colectivos cristianos de Córdoba sus adhesiones, porque «Un crimen contra la naturaleza es un crimen contra nosotros mismos y un pecado contra Dios» (Patriarca Bartolomé, Discurso en Santa Bárbara 1997).
En este contexto, los cristianos y las cristianas de la ciudad de Córdoba entienden que es necesario responder a este «desafío urgente de proteger nuestra casa común que incluye la preocupación de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral» (Laudato Si’ §13).
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